Localizado en Madrid, Mecanismo es un estudio de arquitectura dirigido por Marta Urtasun y Pedro Rica. Ellos, son dos arquitectos con una gran trayectoria y aún más grande futuro. Han trabajado ya con grandes nombres como son Pedro Subijana en su hotel-restaurante Akelarre o Martín Berasategui para su restaurante Lasarte-Oria.
Claramente tenéis un especial cariño por el hotel-restaurante Akelarre, ¿Cuál fue la importancia de materiales naturales en el proceso de creación y desarrollo de este proyecto? ¿Os gustaría trabajar de nuevo con esta clase de materiales?
La identidad y la filosofía del estudio tienen de base el empleo de materiales naturales y la sostenibilidad de los procesos. Siempre apostamos por los procesos en los que la elaboración de los materiales utilizados sea la menor posible, donde el material sea lo que es en su origen. Así, intentando no transgredir su verdadera apariencia, y siendo fieles a su estado más primitivo.
Si pudieseis volver a trabajar en un proyecto de esa escala ¿Qué os gustaría que fuese? ¿Por qué?
No solemos valorar tanto la escala de los proyectos, ni la tipología, ni el presupuesto… si no que afrontamos todos de la misma manera, dándole importancia al proceso. Desde la ideación hasta la ejecución del detalle. Cualquiera de los proyectos que hacemos tiene que ver con lo que hemos hecho anterior. Y, lógicamente con lo que haremos a continuación.
¿Hay algún otro proyecto que os gustaría destacar por el impacto que ha tenido en vuestra carrera o de forma más personal?
La realidad es que destacaríamos muchos independientemente de su envergadura. Por ejemplo, el restaurante Martín Berasategui en Lasarte-Oria, nos ha dado la oportunidad también de realizar un complejo proceso de prefabricación, organización y montaje. El proyecto consistía en construir una nueva sala para el restaurante para lo que decidimos idear una cubierta a partir de un entramado de vigas de madera curvadas de más de 14 m de longitud y uno de canto. Como resultado surgió, espacio caracterizado por su particular geometría. Además, enfatizada por todos los elementos arquitectónicos que lo componen que continúan la curvatura de la cubierta. Fue un proceso de construcción complejo en el que todo estaba milimétricamente fabricado en taller para posibilitar su instalación en un breve periodo de 3 meses.
¿Cuál es vuestra mayor inspiración a la hora de crear y cómo creéis que esto se refleja en vuestro trabajo?
La propia naturaleza del material y sus características intrínsecas, primitivas, nos llevan a tomar las decisiones en cuanto al ambiente, a la geometría o a las sensaciones que queremos lograr en cada proyecto. El análisis de los diferentes condicionantes que se nos presentan es el pilar con el que intentamos dar siempre una respuesta sensata a lo que se nos pide.
¿Qué es lo que más os gusta de vuestro proceso creativo? ¿Qué es lo que menos?
El proceso en su totalidad, desde la primera idea hasta la ejecución de cada detalle. Por otro lado, la relación con el cliente, sus necesidades y la opinión que nos transmite, nos aportan mucho y son fundamentales en el desarrollo del proyecto.
Al mismo tiempo, casi siempre en algún momento del proceso de diseño y ejecución surgen dudas que hay que saber gestionar y reconducir.
¿Hay algo que creéis que hace vuestro día a día trabajando más fácil, algo que os gustaría recomendar a otros arquitectos?
En el día a día vamos sistematizando y automatizando procesos. Todo lo que hacemos siempre tiene que ver con lo que se ha realizado anteriormente. Y, por lo tanto, con lo que vamos a hacer a continuación. Es como el día a día en cualquier ámbito de la vida. En el que mantenemos rutinas que nos permiten vivir con eficacia y eficiencia.
¿Conocéis los materiales de COMPAC? ¿Cómo creéis que se puede usar esta clase de materiales para elevar un proyecto?
El gran abanico de posibilidades que ofrece COMPAC hace que no podamos dar una respuesta concreta a esta pregunta. La posibilidad de emplear piezas de gran formato y la complejidad en sus acabados nos resultan fundamentales para su elección.
¿Cuál creéis que es el papel que juega la tecnología en vuestro trabajo? ¿Cómo creéis que os hace la vida más fácil?
La tecnología, hoy en día, facilita todos los procesos del proyecto. Siempre defendemos que la tecnología que hay que emplear es la necesaria y más sensata en cada situación. No hace falta recurrir siempre a las técnicas más novedosas, sino que muchas veces la solución óptima es la más sencilla y económica.
¿Cuál es vuestra mayor motivación para continuar con vuestro trabajo? ¿Qué es lo que más gratificante encontráis en vuestros trabajos?
Afrontar nuevos proyectos y situaciones novedosas para nosotros, y sobre todo disfrutar del proceso completo del proyecto, casi más que del resultado que siempre es una consecuencia de que este se haya desarrollado con rigor y precisión.
