Los lenguajes arquitectónicos en relación al emplazamiento, suponen una continua lucha frente a los modos de hacer y las tipologías propias del entorno. De tal modo, los proyectos cuyo emplazamiento está en entornos urbanos han cobrado una especial importancia en su morfología, utilidad y contexto social. Este eclipse, ha determinado el diseño de proyectos en el entorno rural. Este se ve condicionado como una anteposición de lo urbano. Respetando la tradición vernácula y ligando el proyecto al entorno, de modo que, en muchas ocasiones en lo visual, resulta complicado diferenciar la temporalidad.
Determinado por el imaginario de quienes habitan en entornos rurales, los hogares construidos en tales emplazamientos, son normalmente situados en una continuidad de la tradición. Unos modos de hacer que suponen un alejamiento en el debate arquitectónico de lo rural, frente a lo urbano.
En The Decorative Surfaces, realizamos un recorrido de dos proyectos arquitectónicos. Planteamos el modo en el que se han ido construyendo nuevos lenguajes de lo arquitectónico en lo rural. Así pues, destacamos dos obras que suponen un nuevo concepto en la continua lucha por desarrollar proyectos alejados de la tradición en estos emplazamientos.
El lenguaje idílico de lo rural
Cuando el imaginario se entrega al diseño, se proyectan arquitecturas casi desapercibidas frente al entorno. Pero no por ello menos espectaculares. La idílica y novelesca transformación arquitectónica, diseñada por el estudio GRAS en el norte de Escocia, supone un punto de inflexión que vale la pena mencionar.
El refugio vacacional parte de una estructura del siglo XIX. Se disuelve desde el exterior con un paisaje montañoso, que invita a la calma. Sin embargo, la ampliación planteada por el estudio se integra en la modernidad. Otorga así a la estancia de una atmósfera cercana a lo contemporáneo.
Es de tal modo como se prescinde de cualquier elemento superfluo en el interior, a través de la espacialidad y el hueco. Las tonalidades grisáceas combinan con detalles oscuros en los marcos de las ventanas. La luminosidad de su superficie interior, es conseguida a través del pulido de piedra de Caithness.
La reestructuración del interior de esta vivienda planteada por GRAS supone un punto de inflexión en el concepto de lo rural frente a lo urbano, a través del alma minimalista del diseño del proyecto.
Maestría rural minimalista
El lenguaje arquitectónico en el medio rural cobra una impresionante potencia con la Casa Benahavís (Málaga, España). Es uno de los excelentes proyectos arquitectónicos de Fran Silvestre, quien fue entrevistado desde The Decorative Surfaces.
Esta vivienda se abre hacia el sur sobre una parcela situada en pendiente. Permite a quien habita disfrutar de unas espectaculares vistas de la vegetación. La planta de la vivienda, tal y como explica el propio arquitecto, se articula mediante los núcleos húmedos que esconden la arquitectura portante.
El minimalismo propio de Silvestre, supone un lenguaje de planteamientos arquitectónicos alejados de lo vernáculo. Se introduce en un minimalismo absoluto que deja de molestar. Se integra de manera mágica con el espacio que circunda la estructura.
De tal modo, la morfología planteada en continente y contenido, permiten la creación de unas formas desarrolladas desde la modernidad. Crea así una contemporánea obra escultórica, muy alejada de la tradición rural.