La realidad social actual se torna líquida en la medida en la que, tanto lo tangible como lo innato, se propone a la deriva de un futuro incierto. Parece que Zigmundt Bauman adivinó que la incertidumbre y el desapego se apoderarían de la sociedad, agitando a los seres humanos en sus quehaceres colectivos.
Es así como las tendencias actuales de lo que se cree, crea y construye, se tornan fluidas como medida de protección del alma. Lo sensorial en el campo arquitectónico se idealiza mediante construcciones que respetan, y casi emergen de lo natural. Lo estético de los diseños, es en realidad, el concepto que habita en el mismo.
Pero es en lo urbano, el lugar donde no siempre es idóneo trabajar con lo efímero. Es en el esqueleto donde se alberga el verdadero concepto de toda una estructura arquitectónica. Más allá de la piel de cristal, la imposición de aberturas y vanos o los elementos ornamentales.
En The Decorative Surfaces realizamos una revisión por la arquitectura de carácter brutalista. Lo hacemos para encontrar desde el germen, el concepto de este movimiento. Un movimiento, el brutalismo, que en 2021 está marcando tendencia en el mundo digital.
La densidad y el ruido visual, como elemento de agitación
Lo revolucionario de este movimiento se muestra en una densidad que se podría entender a través de Le Corbusier. La construcción de Unité d’Habitation, Cité Radieuse (Marsella, Francia); inspiró a toda una generación de arquitectos del siglo XX.
Escalas y medidas imponentes que cumplían con una función urbana concreta y esencial por aquel entonces. Del mismo modo en el que el diseño de paisaje urbano busca ahora el silencio y lo invisible, el ruido marcado de Le Corbusier se proyectaba casi como un prototipo de sus teorías sobre lo público y lo privado.
Pero, ¿por qué el #brutalismo está siendo tendencia en redes sociales?
El brutalismo es ruido en el paisaje. Un sonido que lejos de desgastar, es necesitado por quien habita o camina en la contemporaneidad. Una rigidez que contrarresta con la actual fragilidad latente. Una estética difícil, que amenaza y que se interpone en la mente del observador, obligándole a repensar lo cotidiano.
Un maravilloso ejemplo del modo en el que este tipo de estructuras están teniendo un protagonismo fotográfico en la actualidad digital es La Muralla Roja de Ricardo Bofill en Calpe (España) de la que hablamos anteriormente en The Decorative Surfaces.
La estabilidad del esqueleto estructural
Lo estático es la principal característica de este tipo de diseños. Son remarcados con una ausencia total de ornamentos y planteados mediante una escala de enormes dimensiones. Así pues, la construcción se torna difícil de ser modificada o remodelada a posteriori. De esta manera, da supremacía a la resolución artística planteada por el arquitecto desde el esbozo conceptual del propio esqueleto estructural.
Es de esta manera como se le otorga al arquitecto un predominio de su diseño. Las demoliciones de esta estética tan expresiva de los años 70 han sido en muchas ocasiones, imposibles.
La hegemonía latente del #brutalismo
No existe lo imposible para el estudio MVRDV. A principios de febrero de este año, comenzó el diseño de la pirámide de Tirana en Albania. Una futura rehabilitación de una construcción de estética brutalista que pretende centrarse en el núcleo de su estructura. De tal manera esta hegemonía del diseño primario, es conservada mediante una morfología de cáscara.
A través de la intervención de este diseño, ubicado en la capital albanesa, se recupera un espacio para la ciudadanía. Permite así preservar de manera actual este edificio mediante una radical apertura cediendo el protagonismo a la esencia del proyecto original. Un ruido que se convierte en melodía capaz. Un proyecto que es sin duda, un ejemplo sublime de que el #brutalismo es tendencia.
Thanks.