La tecnología de la impresión 3D ha avanzado mucho en los últimos años. En sus inicios, estas impresoras estaban limitadas por su materialidad plástica y el reducido tamaño de su producción, pero el avance tecnológico ha permitido que en la actualidad se utilice a especialidades como la ingeniería, la medicina, la gastronomía y por supuesto, el diseño.
La impresión 3D es la conformación de un objeto por capas a partir de un modelo generado por ordenador, por lo que las posibilidades que esta herramienta presenta son infinitas. Aplicada a la decoración, esta revolucionaria tecnología representa una mayor libertad creativa que permite experimentar con morfologías novedosas y una posibilidad de personalización de los objetos absoluta.
Único e irrepetible
Mediante el uso de la tecnología 3D, se aumentan las posibilidades creativas de los diseñadores, ya que es un sistema productivo que facilita la experimentación. Además, al ser una elaboración unitaria, no conlleva gastos significativos de producción.
Por otro lado, al ser un objeto 3D creado desde cero, brinda la posibilidad de personalizarse, acercando el diseño al público en general y diferenciándose de la producción masiva del mercado. Un objeto de decoración personalizado, le otorgará al espacio un valor agregado.
La tecnología de impresión 3D se encuentra en un gran proceso de desarrollo en el que la decoración de interiores ha encontrado un buen aliado para continuar evolucionando y romper con todo lo que conocíamos hasta ahora en este campo.
Una solución sostenible
Otra de las razones por las que la impresión 3D está en alza dentro de la decoración, es por sus rasgos ecológicos. Además de la energía que necesita para trabajar y la materia prima a utilizar, no precisa de ningún otro recurso y genera muy poco residuo de material. También posibilita la optimización del trabajo humano, ya que un mismo modelo puede ser reproducido sin tener que agregar más horas de trabajo.
En cuanto a la materialidad, las impresoras 3D presentan una amplia gama de opciones, ya no están limitadas al plástico de colores con el que surgió, sino que puede trabajar con metales, madera, cemento, porcelana, arcilla, entre otros.
Al mismo tiempo, muchos estudios de diseño especializados en la impresión 3D, como Emerging Objects, buscan nuevas combinaciones de materiales ecológicos que permitan utilizar componentes como sal, arena y te en sus composiciones. A partir de generación de un nuevo objeto de decoración, estos materiales dejan de ser desechos para convertirse en algo nuevo.
Propuestas decorativas
Debido a la amplitud de propuestas que ofrece la impresión 3D, casi todos los objetos que componen el diseño de interiores pueden ser fabricados mediante este proceso. Paneles decorativos para revestimientos, suelos, mobiliario, iluminación, vajillas y hasta accesorios de cocina y baño.
La impresión 3D pretende generar objetos funcionales y decorativos, que puedan materializarse en formas novedosas. Uno de los objetos más reproducidos mediante este proceso son las sillas, que permiten una exploración morfológica mucho mayor.
El estudio de diseño español Nagami se especializa en la creación de sillas impresas, a partir de los diseños de grandes figuras internacionales como Ross Lovegrove o Patrick Shumacher, del estudio de Zaha Hadid.
También pueden diseñarse objetos técnicos, como las griferías de la empresa American Standard que con su marca DVX lanzó tres modelos impresos en porcelana y de acabado metálico. Estas propuestas combinan diseño con funcionalidad en un elemento poco pensado, en sus inicios, para la inclusión de la impresión 3D en el diseño.
A gran escala
En contraposición con los objetos utilitarios, la impresión 3D otorga posibilidades de mayor escala como solución sostenible y personalizada de los espacios. Con elementos como suelos, revestimientos o fachadas, propone morfologías que transforman el espacio y participan de la decoración del mismo.
El estudio de arquitectura DUS integra la impresión 3D en todos los aspectos de sus proyectos, incluyéndolo en fachadas, suelos y mobiliarios. Uno de sus proyectos más conocidos es la intervención temporal del edificio de presidencia en Amsterdam durante la cumbre de presidentes europeos, en el que se transformó su fachada por medio de una morfología nueva que no sólo cumplía un fin decorativo, sino que resultaba también funcional.
En un proyecto más pequeño, el mismo estudio diseñó la tienda insignia de Loft en Tokio, en el que integraron la impresión 3D en la realización de pavimentos, mesas, sillas y expositores. En la decoración de un espacio comercial, este proceso otorga la posibilidad de adaptar el espacio y sus objetos a los colores, estilo e identidad de una marca.
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