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Cinco referencias literarias con la arquitectura como protagonista

Por 9 abril, 2020 Sin Comentarios

La ficción suele recurrir a referentes reales para alimentar la verosimilitud del argumento que proyecta en la persona que accede a su lectura. A más referencias identificables, la misión de convertir en creíbles los hechos que se narran aumenta. De hecho, autores de novelas de ficción en clave histórica, como Dan Brown, han tenido que desmentir en ocasiones que sus producciones fueran relatos cronológicos de acontecimientos ocurridos de verdad. Porque la ficción a veces sorprende al lector con su capacidad de convertir los hechos que recrea casi en reales.

En el capítulo de la arquitectura y el diseño, encontramos numerosas referencias que recomendar. Con todo, centramos el foco en estas cinco lecturas en las que sus protagonistas, directos o indirectos, son o profesionales del sector o edificios y espacios emblemáticos fácilmente reconocibles por el lector.

Blitz, de David Trueba

Arquitectura y literatura: Blitz de David Trueba

El polifacético autor madrileño interpone en esta obra, cuya trama desarrolla su grueso en Múnich, dos personalidades de arquitectos tipo. Por un lado, el profesional reconocido de éxito que proyecta en paralelo virtudes personales que lo embellecen aún más si cabe. Y, por otro, el más discreto, Beto. Un arquitecto paisajista que tiene la timidez como rasgo principal de su carácter, que admira al anterior y no consigue identificar sus propios valores. Todo ello, aderezado en una trama divertida, sarcástica y enamoradiza que hace temblar el sentido del equilibrio entre lo racional y lo irreal en consonancia con un proyecto arquitectónico que nunca se pone en práctica. Entre el funcionalismo de un parque público y lo insólito de una propuesta mal defendida ante quienes han de apostar por ella.

Notre Dame, de Ken Follet

Arquitectura y literatura: Notre Dame de Ken Follet

Este escritor es un paradigma por el uso de contextos arquitectónicos históricos en sus novelas. En la serie de Los pilares de la Tierra ya da fe de ese empleo contextual de elementos y de referencias emblemáticas dentro de la arquitectura patrimonial.

Arquitectura y literatura: Notre Dame de Ken Follet

Con todo, en Notre Dame, el novelista abre su corazón en forma de relato breve a la catedral parisina, justo después de sufrir el incendio que hizo temblar los cimientos del asombro mundial en abril de 2019. Follet describe el sentir que le significó el suceso. Y lo hace con un repaso más o menos exhaustivo por la historia de este edificio singular, desde 1163 hasta la fecha del incendio. Una de las reflexiones que aporta se centra en que los que levantaron Notre Dame pensaron que sería arquitectura eterna, que llegaría hasta el juicio final. Si los constructores de la Edad Media hubieran podido ver cómo se derrumbó la aguja del templo quizás habrían cambiado de opinión.

Mañana tendremos otros nombres, de Patricio Pron

Arquitectura y literatura: Mañana tendremos otros nombres de Patricio Pron

Ganadora del Premio Alfaguara de Novela 2019, la trama se centra en la ruptura de una relación amorosa, la de Él y Ella. Un recorrido por los tópicos que rodean una situación de ese tipo, en el que Ella es arquitecta y encuentra inspiración profesional en sus continuas salidas del espacio vital que comparte con Él en el hogar. Excursiones de ida y vuelta que la conducen al extrarradio de las ciudades o a viajar para localizar edificaciones singulares propias de dichos enclaves. El autor sabe combinar la ficción y la realidad a través del amor, la arquitectura, los barrios y la vida, en esencia.

En casa, de Bill Bryson

Arquitectura y literatura: En casa de Bill Bryson

¿Cómo descubrir la historia de los procesos de fabricación y de producción de los elementos que nos rodean sin salir de casa? No, no es una trama reciente, consecuencia del aislamiento social propiciado por el Covid-19, es una novela escrita en 2010 por Bill Bryson. En ella, reflexiona sobre cómo la esencia de las cosas y nuestra evolución histórica residen en la misma estructura de nuestras casas. Una narración brillante que ayuda a recapacitar sobre lo básico, los proyectos que han guiado la evolución y el sentido primigenio de las estructuras arquitectónicas como conductoras de inspiración histórica. Una forma insólita por parte del escritor estadounidense de practicar lo que mejor sabe hacer: la divulgación científica y viajera. Aunque en este título, cambia su estilo habitual y las aborda desde la ficción y el ingenio más divertido para los ojos del lector.

El manantial, de Ayn Rand

Arquitectura y literatura: El Manantial de Ayn Rand

La novela, escrita en 1943, fue el mayor éxito editorial de la autora de origen ruso. De hecho, fue llevada a la gran pantalla en 1949 por King Vidor, con Gary Cooper y Patricia Neal como protagonistas principales. La trama plantea el sempiterno dilema entre asumir lo convencional o romperlo hacia una apuesta vanguardista. En la obra, el joven arquitecto Howard Roark emprende una cruzada contra la arquitectura racional y tradicional, para él carente de originalidad.

Con todo, la obra encierra en la moraleja de su trama una reflexión más profunda, incluso filosófica. A caballo entre la percepción colectiva en torno a una manifestación como la arquitectónica o el sentido que puede añadir un individualismo feroz por defender una alternativa que roza el egoísmo más singular. Como siempre, es recomendable leer antes el libro que ver la película. Aunque la recreación de la trama en la gran pantalla respeta de forma fiable el sentido y la reflexión que la autora de El manantial quiso trazar en su obra.

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