Con la llegada del solsticio propio de la época estival, los exteriores recobran la fuerza propia del habitar espacios que propician al bienestar humano. Un excelente ejemplo es el modo en el que las piscinas se convierten en estructura simbólica de lo natural. Configurando así una satisfacción térmica en espacios externos.
En The Decorative Surfaces vislumbramos algunas de las piscinas más exclusivas para invitar a la relajación, suspirar al lujo y soportar las temperaturas que otorga nuestro núcleo calorífico de la vía láctea.
El infinito construido
La imposibilidad de trabajar un espacio sin límites, se emplaza en la creación de exclusivos diseños de depósitos acuíferos que son, sin lugar a dudas, el sumergir idílico que todo ser quisiera habitar en dicho momento. Los límites se suprimen en la colocación de estas estructuras en sitios inverosímiles. Lugares de ensueño que conectan de un modo sublime con lo natural.
La contemplación del mar es evidente que invita a quien observa a concentrarse en la calma y el sosiego. Además, las conocidas piscinas infinitas son una tendencia estructural que alberga el lujo absoluto.
Sentir que lo exterior es inmenso, invita a la reflexión existencial. La infinidad del mar y el cielo es la sensación que evoca habitar en unas albercas como tales. El desbordamiento de la caída en depósito estructura lo artificial. Sin embargo, la sensación de vacío invita a una profunda introspección humana.
La morfología infinita de tales estructuras se reviste de materiales pétreos otorgando exclusividad y lujo.
El mármol como protagonista absoluto.
Dentro del mundo de lo pétreo, el mármol es considerado la elegancia absoluta. Por sus cualidades como material y su elegancia visual. Unas características propicias para configurarse como el elemento protagonista del revestimiento de piscinas, dotando a la instalación de una mejora en el mantenimiento subrayada por una refrescante elegancia.
El minimalismo es el condicionante de una absoluta paz y tranquilidad de piscinas y ambientes exteriores que, en combinación con otros elementos, propician a que el ambiente exterior esté reinado por la exclusividad.