Entre la decoración y la creación de espacios. Entre el sentido más artístico y funcional. el lujo y la sobriedad. La eficiencia bioclimática y la tecnología más puntera. El trabajo que despliegan los interioristas por el mundo adquiere en los últimos tiempos una proyección global de tendencias continentales.
Con todo, cada continente conserva la esencia que identifica los gustos locales. La historia de cada pueblo o la evolución de las tendencias que los rigen. En The Decorative Surfaces emprendemos un recorrido por cinco nombres que, de alguna manera, identifican la forma de crear y de decorar espacios en relación a los gustos del entorno que habitan.
América eficiente
Ponemos el foco en Centroamérica, de la mano de Héctor Delmar, Premio Prisma 2019. Él es reflejo de cómo el respeto por el entorno puede guiar las intervenciones de espacios interiores. Es impulsor de conceptos bioclimáticos. De praxis sobrias en contextos de enclaves que conservan la riqueza del paso del tiempo.
Según el arquitecto, “hoy en día el interiorismo usa materiales con mayor eficiencia, menos energía embebida para su fabricación, que intentan entrar en el ciclo de vida circular y ya no lineal, que se reciclan o sin reciclados”, explicó a The Decorative Surfaces.
África vernácula
Hugo Harmity lleva desarrollando desde hace más de dos décadas toda su actividad profesional desde Sudáfrica. Con proyectos en otros países del continente, como Namibia, Ghana, Zambia, Madagascar o Zimbabue. Por tanto, este profesional de origen argentino conoce muy bien hacia dónde discurre el interiorismo africano. Y se ha especializado en un tipo de vivienda en auge: el unifamiliar.
De su país de residencia, y desde su atelier en Johannesburgo, percibe en África, «varias identidades arquitectónicas que conviven juntas en las mismas ciudades. Cada una de ellas tiene una historia arquitectónica diferente que contar, y a todo ello se suma el movimiento contemporáneo y modernista internacional de los últimos años, que también tiene su propia expresión con toques vernáculos». Así lo expresó en unas declaraciones que realizó al periódico argentino La Nación.
Oceanía lujosa
Alejandro Borrego es un arquitecto y diseñador de interiores español que reside en Bali. Allí tiene su atelier y desde él proyecta las tendencias que gustan en un ámbito marcado por el lujo y las calidades de materiales. “Vivir y trabajar en las islas de Lombok y Bali me ha dado una comprensión refinada de los materiales locales, el clima y la arquitectura tradicional que nos permite asimilar armoniosamente el modernismo con la sabiduría tradicional de la isla”.
El diseño inteligente y sostenible se unen al epíteto lujoso que marca el trabajo del interiorista en esta zona del planeta. Y, como hemos visto en anteriores artículos, el uso de superficies de materiales reciclados o de la madera de origen ecoefcieinte marcan las raíces de los espacios. Esos que dialogan con las playas, los arrozales y los templos al aire libre que caracterizan a Indonesia.
Europa creativa
Arik Levy es artista asentado en París. Desde allí se asoma a las tendencias europeas siempre con un aporte adicional. Son un sello propio que inspira a numerosos profesionales del continente. Es un visionario, un vaticinador de tendencias. Un arquitecto que encuentra los límites en la creatividad y en la innovación.
Como Director Creativo de COMPAC, ha desarrollado hace poco proyectos con el nuevo material de la firma, Obsidiana. Con todo, como referente del ramo en Europa y en el mundo observó hace unos años en las páginas de El País: «El mundo funciona por yuxtaposiciones. Es absurdo que un diseñador se aísle en un reducto. La mezcla demuestra que has vivido”.
Asia ‘naturalmente perfecta’
El decorador del mundo del lujo, Bruno Moinard, dijo que “todo es bonito en Japón, desde la alcantarilla a los adoquines de la acera, todo es tan naturalmente perfecto que parece diseñado previamente ad hoc”. Estas palabras son las que inspiran de forma habitual a este creador de espacios. Él encuentra en el país nipón el punto de relajación necesario para inspirar las nuevas creaciones y encargos que recibe.
De Asia es difícil, aún así, definir una tendencia que marque un estilo único a etiquetar. Sí, en cambio, para una mentalidad occidental enfocada a la acumulación de materiales y objetos en un mismo espacio. Podríamos extraer como nota distintiva del diseño que se practica en Oriente desde un nuevo modernismo la aspiración al minimalismo, el reduccionismo y el funcionalismo como forma de interpretar el día a día profesional.
